FLORES EN EL INFIERNO

Radioclip en texto sin audio grabado.

Las mujeres afganas no pueden trabajar fuera de casa, no pueden estudiar, no pueden hablar en público. [PORTUGUÉS]

LIBRETO

CONTROL MUSICA ARABE TRISTE QUEDA DE FONDO

NARRADORA Camina despacio, pues la ley prohíbe que sus pasos sean escuchados. Debe ser una sombra envuelta en telas de colores apagados que no inciten el deseo masculino. Ni un milímetro de su cuerpo debe ser mostrado a la luz bajo pena de lapidación pública. Su rostro, invisible, anónimo, es sepultado en vida tras una reja de hilo. La risa está prohibida, así como sus voces y sus cantos, escondidos tras el velo de un silencio dramático y hondo. Todo está prohibido para las mujeres afganas, especialmente, la posibilidad de soñar un mundo distinto: horizontes que trasciendan el “burka “ que ahoga su rostro. Cualquier gesto cotidiano se convierte en utopía. Respirar, seguir viviendo, ya es una victoria.

CONTROL MÚSICA ARABE TRISTE FUNDE CON EFECTOS DE GUERRA

LOCUTOR En 1996 los talibán, grupo armado minoritario, tomaron el poder en Afganistán e impusieron la ley islámica más extrema, la “sharia”. Desde entonces, las mujeres y hombres afganos viven despojados de todos sus derechos.

LOCUTORA Para el talibán, la mujer es considerada como “una flor que debe permanecer en la casa, para que el hombre al volver huela su perfume”.

LOCUTOR El “Ministerio para Regular lo Correcto y Prohibir lo Incorrecto” protege a las mujeres de los vicios y el pecado. Para ello, las obliga a cubrirse con el “burka”, una larga túnica cuya única abertura es una pequeña rejilla a la altura de los ojos.

LOCUTORA Las mujeres no pueden trabajar fuera de casa, ni acudir al colegio o a la universidad. No pueden salir a la calle sin su marido, padre o hermano.

LOCUTOR Las mujeres no pueden manejar carro ni montar bicicleta. No pueden hablar en público. No pueden ser atendidas por un médico. No pueden asomarse al balcón, ver la televisión ni asistir a reuniones.

LOCUTORA Las mujeres afganas son asesinadas por exponer alguna parte de su cuerpo accidentalmente mientras caminan o por no utilizar zapatos suficientemente silenciosos como para pasar desapercibidas.

CONTROL MÚSICA ÁRABE TRISTE

LOCUTOR En 1992, las afganas representaban el 50 por ciento de la fuerza de trabajo. La mitad de los estudiantes y profesores de la Universidad de Kabul eran mujeres. El 40 por ciento de los médicos eran mujeres.

LOCUTORA Hasta 1996 tenían libertad para trabajar, vestían como querían y aparecían solas en público.

LOCUTOR Ahora, bajo el régimen talibán, es común ver abogadas, médicas y profesoras mendigando. Miles de viudas carecen de ayuda teniendo sus familias a cargo. Muchas mujeres, cansadas de sufrir, se suicidan quemándose vivas.

EFECTOS RUIDOS DE GUERRA

LOCUTORA Hace 12 años, en la guerra contra la Unión Soviética, el pueblo afgano perdió más de un millón de vidas. Cuatro millones se exilaron. Quedó un millón de huérfanos y 500 mil sobrevivientes con miembros amputados.

LOCUTOR Las mujeres afganas no quieren más guerra. Ya han tenido demasiadas en su historia. Rechazan el terrorismo que mata inocentes y rechazan la guerra que también los mata.

LOCUTORA Las mujeres afganas no quieren ser flores en el infierno machista de los talibán. Pero tampoco quieren entrar a otro infierno, el de la guerra, donde ellas y sus maridos y sus familias serán aniquilados en nombre de una venganza infinita.

BIBLIOGRAFÍA

  • Mujeres Afganas: flores en el infierno, artículo de Marta Caravantes, julio 2001.
  • Imagen de Amber Clay en Pixabay