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20- HABLAR SIN TAPUJOS

LIBRETO

LOCUTOR A continuación, nuestro habitual espacio “El consultorio sexual de la doctora Miralles”.

CONTROL CARACTERÍSTICA CONSULTORIO

DOCTORA Aquí estamos nuevamente, amigas y amigos del consultorio. Y nuevamente para hablar de sexualidad. Como recordarán, en el programa anterior estábamos conversando sobre los juegos de niños y niñas, cuando se ponen a jugar a papá y mamá, a los doctores… Escuchen estas frases a ver si les resultan familiares…

CONTROL MÚSICA DE TENSIÓN

VARIAS VOCES ¡Sácate la mano de ahí, cochina! ¿Quién te enseñó esas porquerías, eh? ¡Si te sigues tocando te voy a cortar el pito!… ¿Me oyes? ¿Me oyes bien?

CONTROL MÚSICA DE TENSIÓN

DOCTORA Y otras lindezas por el estilo. Y así, muchos papás y muchas mamás les contagian a sus hijos sus propias represiones, su pésima información sobre la sexualidad.

EFECTO TELÉFONO

DOCTORA ¿Sí, aló?

VECINO Perdone que me entrometa, doctora…

DOCTORA No, nada de eso, nadie está entrometido en este consultorio… Dígame cuál es su consulta…

VECINO Mi consulta, doctora, es que yo no sé hablar.

DOCTORA ¿Cómo que usted no sabe hablar?

VECINO Hablar con mis hijos sobre estas cosas de la moral… Eso es tan difícil…

DOCTORA Veamos. La única moral es la mata de mora.

VECINO ¿Cómo dice usted?

DOCTORA Quiero decir que muchas veces le llamamos moral a nuestros miedos, a nuestros prejuicios, a nuestros sancochos mentales… Y por eso no sabemos hablar con nuestros hijos.

VECINO ¿Y cómo suelto la lengua, doctora?

DOCTORA Le doy algunos tips. El primero, siempre que el niño o la niña haga una pregunta referida a la sexualidad, responda con claridad y sencillez, sin medias palabras, sin tapujos. Siempre.

VECINO Yo hago como si no oyera y cambio la conversación.

DOCTORA De ninguna manera. El niño se sentirá frustrado.

VECINO Doctora, es que el otro día me preguntó que por qué los grandes tienen pelos ahí abajo… y por qué él no los tiene.

DOCTORA ¿Y qué problema tiene usted con los pelos?

VECINO Lo que pasa… Otras veces le digo: “Cuando seas más grande te lo explico”.

DOCTORA No, mi amigo, no. El niño no puede esperar. Quiere saber ahora. La niña igual. Por cierto, ¿su mujer tampoco sabe hablar con sus hijos?

VECINO Ella es peor. El otro día el chico le pidió que le enseñara el lugar por donde vienen los niños al mundo. Casi le da un infarto.

DOCTORA ¿Y qué dijo ella?

VECINO Dijo: Pregúntale a papá cuando llegue.

DOCTORA Y papá, pregúntale a mamá. Y así se pasan la pelotita. No, señor, la educación sexual es responsabilidad de la pareja… ¿Aló?

EFECTO TELÉFONO

VECINA Aló, doctora… Pues vea, a mí me pasa lo contrario que al señor. Mi niña no me ha preguntado nada sobre nada y ya tiene 7 años. ¿Qué hago, eh?

DOCTORA Es probable que tu hija haya tenido una mala experiencia cuando alguna vez preguntó, no sé. Pero lo que puedes hacer es aprovechar las oportunidades. Por ejemplo, ven una mujer embarazada por la calle… o dos que se dan ese beso de lengua en una película… o hasta dos perritos pegados… y le sacas tú la conversación… Otra llamada… ¿aló?

EFECTO TELÉFONO

MAESTRO Está muy bien lo que usted dice, doctora. Pero yo trabajo en una escuela donde tengo niños pequeños, de cinco y seis años. Y otros ya más mayorcitos. El otro día encontré a uno de ellos frotándole el calzón a una niña…

DOCTORA Ah, no, eso es otra cosa. Yo dije que si son pequeños, de la misma edad, no hay problema. Es la curiosidad infantil. Pero lo que me cuentas es otra cosa. Eso es muy peligroso y hay que evitarlo porque podemos estar incluso ante un incesto.

MAESTRO ¿Y en ese caso, doctora?

DOCTORA Habla con el pequeño, con la pequeña, expicándole que nadie puede tocar su cuerpito… Y habla con el mayorcito muy seriamente, porque eso no está nada bien. Pero, sobre todo, habla con las mamás y los papás de ellos. Y cuéntales. El consejo siempre será la palabra. Hablar con claridad, sin tapujos, explicando bien las cosas. ¡Hasta la próxima, mis amigas y amigos del consultorio!

BIBLIOGRAFÍA