108- LOS MUJERIEGOS (2)
LIBRETO
LOCUTOR A continuación, nuestro habitual espacio “El consultorio sexual de la doctora Miralles”.
CONTROL CARACTERÍSTICA CONSULTORIO
DOCTORA Amigas, amigos, ¿cómo están? ¿Bien? Yo también, aunque les diré que desde el programa anterior me tienen saturada la línea… Sobre todo, los hombres… Llaman y llaman… Como dije que los mujeriegos eran “impotentes afectivos”… En cuanto oyen “impotencia”, algunos se alborotan… Pues prepárense, porque hoy voy a decir una cosa más tremenda aún. Pero antes…
CONTROL MÚSICA DRAMÁTICA
HOMBRE 1 Ven… No tengas miedo, muchachito…
NIÑO ¡No quiero, no quiero que me toque!…
HOMBRE 1 Si te portas bien y juegas conmigo, te doy estos caramelos…
NIÑO No quiero…
HOMBRE 1 (AMENAZA) Vas a hacer lo que yo te digo… Y cuidado con decírselo a nadie… Ven acá… Bájate los pantalones…
CONTROL MÚSICA DRAMÁTICA
DOCTORA Amigas, amigos. Estamos hablando de los mujeriegos. Y ustedes se preguntarán, ¿qué relación tiene la escena terrible que acabamos de escuchar con este tipo de hombres?
EFECTO TELÉFONO
MUJER 1 ¿Aló?… ¿Doctora Miralles?
DOCTORA Sí, dígame.
MUJER 1 Yo no sé qué relación tendrá, pero yo pienso que esas cosas no se deben decir por la radio… Los niños escuchan y…
DOCTORA Eso es lo que queremos, señora, que escuchen. Que abran los oídos y los ojos y no se dejen engañar.
MUJER 1 Pero esos casos, doctora, no sé… se dará uno entre cien mil…
DOCTORA Ojalá tuviera usted razón, mi amiga. Pero, lamentablemente, las estadísticas muestran, cada día más, que la violación de menores y el incesto, es una tragedia demasiado frecuente en nuestros hogares.
MUJER 1 Tal vez en los hogares de la gente pobre…
DOCTORA En todos los hogares, señora, en todas las clases sociales. Ricos, pobres, clase media… Y el abuso sexual se comete contra niñas y contra niños casi en la misma proporción.
MUJER 1 ¿Usted tiene datos de eso que está diciendo?
DOCTORA Nadie tiene los datos exactos, porque es un secreto muy bien guardado. Las víctimas tienen miedo y no hablan. La familia tiene vergüenza y tampoco habla. Nadie habla, pero las cifras son aterradoras. Uno de cada cinco, uno de cada tres…
EFECTO TELÉFONO
DOCTORA ¿Aló, sí?
HOMBRE 2 Verá, doctora, yo tengo un primo mío que fue… que fue abusado cuando era chiquito. El me lo contó muchos años después. El padrastro le pedía que lo masturbara… unas cosas muy feas…
DOCTORA ¿Y qué hace tu primo ahora, cómo vive?
HOMBRE 2 Bueno, ya él es mayor… Si le cuento, no me lo va a creer. Es el más mujeriego del barrio…
DOCTORA Es que así ocurre. Esos niños que fueron abusados, crecen con un trauma terrible porque, además, a muchos los convencieron que eran homosexuales. Entonces, cuando son mayores, ¿cómo van a demostrar, a ellos mismos y a los demás, que no lo son? Teniendo muchas mujeres.
EFECTO TELÉFONO
MUJER 2 ¿Doctora Miralles?
DOCTORA Sí, dime.
MUJER 2 Doctora, si yo le entiendo bien, usted dice que todos los mujeriegos fueron abusados cuando niños…
DOCTORA No, no se me enrede. Escuche bien. Yo digo y lo dice cualquier psicólogo, que muchos hombres mujeriegos sufrieron abuso, se vieron a sí mismos como homosexuales, o les dijeron que lo eran, y ahora tratan de demostrar lo contrario.
MUJER 2 Pero hay otros, doctora…
DOCTORA Hay otros que son mujeriegos por el mal ejemplo de su casa, el machismo del padre. Y de la madre. Otros son mujeriegos para superar sus complejos, su baja autoestima… En todos los casos, el remedio es peor que la enfermedad.
MUJER 2 ¿Por qué dice usted eso, doctora?
DOCTORA Porque la sed no se cura bebiendo agua de mar. El sexo sin amor (y eso es lo que hace un mujeriego) es como beber agua salada. Más bebe, más quiere, y no se satisface nunca. Como les decía, son impotentes afectivos.
MUJER 2 Doctora… ¿y qué les aconsejaría usted, entonces, a tanto mujeriego que anda suelto por ahí?
DOCTORA A los hombres que me están escuchando ahora y que hayan sido abusados cuando niños, les recomiendo que vayan donde un psicólogo. De veras, pidan ayuda profesional. Y a los otros, a los machistas del montón… ¡que sigan escuchando este consultorio! ¡Hasta la próxima, amigas y amigos!
BIBLIOGRAFÍA