|

40- UNA SEMILLA NO ES UN ÁRBOL

LIBRETO

LOCUTOR A continuación, nuestro habitual espacio “El consultorio sexual de la doctora Miralles”.

CONTROL CARACTERÍSTICA CONSULTORIO

DOCTORA Amigas, amigos, ¿cómo los trata la vida? ¿Bien? Me alegro. Y también me alegro de seguir conversando con ustedes sobre este tema difícil, el tema del aborto. Un tema que tenemos que aclarar porque hay mucho miedo y muchos sentimientos de culpa en las mujeres que han tenido que enfrentarlo… Las llaman asesinas, madres desnaturalizadas, las mandan primero a la cárcel y luego al infierno…

EFECTO TELÉFONO

DOCTORA ¿Sí, dígame?

MUJER ¿Y no son asesinas, doctora?

DOCTORA ¿Quiénes, las mujeres que interrumpen un embarazo?

MUJER Sí. Porque quien elimina voluntariamente una vida humana está asesinando, digo yo.

DOCTORA Claro, mi señora, pero la cosa, como decíamos en el otro consultorio, es averiguar cuándo comienza la vida humana. Ese es el asunto.

EFECTO TELÉFONO

DOCTORA ¿Aló, con quién tengo el gusto?

ALVAREZ Con el doctor Álvarez. Soy biólogo.

DOTORA Qué suerte la mía y la de nuestros oyentes… A ver si usted nos aclara, doctor Álvarez, cuándo comienza la vida humana.

ALVAREZ Bueno, nos han hecho creer que la vida humana comienza cuando un espermatozoide masculino entra en un óvulo femenino.

DOCTORA Eso dicen y repiten, sí.

ALVAREZ Pero esa es una visión muy materialista, muy poco científica.

DOCTORA ¿Y cuál es la visión científica? Explíquenos.

ALVAREZ Como usted sabe, doctora Miralles, un embrión de dos o tres semanas es apenas un puntito… el punto que usted hace con un lápiz es mayor que ese embrión… ¿Diremos que ese punto es una vida humana?

DOCTORA Lo que dicen, doctor Álvarez, es que ese punto, esa semillita, es ya un ser humano “en potencia”.

ALVAREZ Lo que pasa es que todas las células de mi organismo y del suyo son vida humana “en potencia”. Yo puedo tomar una célula de mi nariz y a partir del código genético que encierra puedo clonar, puedo fabricar un ser humano.

DOCTORA Le hago de abogado del diablo, mejor dicho, de abogada de la diabla…

Esa semillita, ésa y no otra, esa semillita que está en el vientre materno, si la dejamos crecer, llegará a formar un ser humano… ¿Entonces?

ALVAREZ Respondo con su mismo ejemplo, doctora. Cuando usted se toma un jugo de naranja, bota las semillas, ¿verdad? Todas esas semillas son árboles “en potencia”. Si las sembramos y dejamos crecer, tendríamos un bosque de árboles de naranja. Pero no vamos a decir que botar semillas es lo mismo que cortar un bosque, ¿verdad?

DOCTORA Es decir, una semilla no es un árbol. Y tampoco un embrión humano es un bebé.

ALVAREZ Exacto.

DOCTORA Doctor Álvarez, ¿y qué dice, entonces, la ciencia? ¿A partir de cuándo podemos hablar ya de un ser humano?

ALVAREZ Hay diferentes opiniones, claro. Pero científicos de la talla de Carl Sagan dicen que en las primeras doce semanas, es decir, en los tres primeros meses de gestación, no se puede hablar de un ser humano porque todavía no están establecidas las conexiones cerebrales que son las que nos hacen humanos.

DOCTORA Será por eso que en muchísimas legislaciones autorizan interrumpir el embarazo en esos dos o tres primeros meses.

ALVAREZ Imagínese, es a partir de los seis meses que se comienza a conectar el cerebro, y esas conexiones son las que nos permitirán pensar y tener conciencia… las que nos hacen seres humanos.

DOCTORA Muchas gracias, doctor Álvarez. Cualquier día lo llamamos nosotros a usted para que nos siga aclarando cosas.

ALVAREZ No, gracias a usted, doctora Miralles. Sabe que estamos a la orden.

DOCTORA Y bien, mujeres que me escuchan, especialmente aquellas que hayan tenido que recurrir alguna vez a un aborto por las razones que sólo ustedes conocen bien, no se sientan culpables ni condenadas, como si hubieran cometido un asesinato… Nada de eso. ¿Saben qué? En el próximo consultorio vamos a analizar algunos casos en los que el aborto está perfectamente justificado. Ahí la seguimos. ¡Hasta la próxima, mis amigas, y mis amigos también!

BIBLIOGRAFÍA