EL CHOLO

Un cuento del escritor tico Carlos Salazar Herrera.

EFECTO CAMPO

CAPATAZ ¡Malaquías Badilla!… ¡Isidro Mena!… ¡Jacinto Alfaro!

NARRADORA El capataz de la finca llamaba uno a uno a los trabajadores. En fila india, la cuadrilla, olorosa a sudor, recibía el jornal de la semana.

EFECTO MURMULLOS

MIGUEL Ese Cholo es un desgraciao, me quitó el surco. Se confía en que es un matón. Pero me las va a pagar.

AMIGO No te metas con el Cholo, Miguel.

MIGUEL Yo no le tengo miedo a nadie.

AMIGO Pues, ¡cuidate!… ¡Estás avisado!

CONTROL CANCIÓN LATINOAMERICANA

NARRADORA Era sábado y en la noche, todos se reunieron en la cantina. Algunos bebían, otros jugaban a las cartas y el resto cantaba acompañándose con la guitarra. De pronto…

MIGUEL ¿Ónde está el Cholo?

AMIGO ¿Qué te pasa, Miguel?

NARRADORA Miguel estaba borracho y enfurecido. Con la hoja de su cuchillo había trazado en el aire una interrogación de luz mientras buscaba con la mirada asesina entre los parroquianos…

MIGUEL ¿Ónde está el Cholo?

AMIGO No está aquí, Miguel.

MUJER El Cholo no está. ¿Pa qué te hace falta?

MIGUEL ¿Que pa’ qué?… ¡Pa cortarle el resuello!

AMIGO Tranquilízate, Miguel.

MIGUEL ¡Tráiganse al Cholo, que dicen que es tan hombre!

MUJER El Cholo es malo. Mejor no te metas con él.

MIGUEL ¡Yo soy más hombre que el Cholo!

AMIGO ¡Piensa con la cabeza, Miguel!

MIGUEL ¿Ónde está ese desgraciao? Lo voy a matar.

CONTROLSICA TENSIÓN

NARRADORA Miguel Camacho, sordo, ciego y rabioso, se había echado a la calle, cuchillo en mano.

AMIGO Como llegue el Cholo, aquí va haber un muerto.

MUJER Pero Miguel tiene razón. El Cholo le quitó el surco pa’ que le aumentaran el jornal.

AMIGO Miren, ¡ahí viene el Cholo!

CONTROLSICA LATINOAMERICANA

NARRADORA Allá, en lo alto del camino, por entre la penumbra, se acercaba su figura atlética y brutal. Entonces se hizo un trágico silencio entre toda la peonada. El Cholo avanzaba lentamente, chasqueando con deleite un cabo de puro. Miguel apretó el puño del cuchillo y avanzó decidido a su encuentro.

MIGUEL (PENSANDO) ¡Saca tu puñal, Cholo desgraciao, pa que nos cortemos!

EFECTO JADEOS DE MIGUEL

MIGUEL ¡Defiéndete o te mato de cualesquier manera!

NARRADORA El Cholo detuvo el paso y retrocedió sin dar la espalda. Nadie creía en lo que estaba viendo. El Cholo, por primera vez en su vida, evadía una riña, se acobardaba, retrocedía.

MIGUEL ¿Tienes miedo?

NARRADORA Los rudos hombres, acostumbrados a ver pelear al Cholo, esperaban un salto de tigre sobre el adversario. Entonces, quedaría un muerto en el camino, y ese muerto sería sin duda Miguel.

AMIGO ¿Qué pasa, Cholo? ¿Ónde está el hombre? ¡No seas cobarde!

HOMBRE Pelea, cholo. ¡Demuéstrale lo que eres!

NARRADORA El Cholo contempló a sus amigos y, pasándose el reverso de su manaza por la boca como para evitar una sola palabra, dio la espalda.

MIGUEL (BURLÓN) ¡Ahí lo tienen, huyendo, al más “valiente” de la peonada!

HOMBRES RISAS, INSULTOS

NARRADORA El Cholo caminaba hacia su casa, sintiendo en la cabeza, como pedradas, las burlas de toda la peonada revuelta. Su mejor amigo corrió tras él.

AMIGO (AGITADO) Cholo…Cholo… ¿Qué pasó, Cholo?… ¿Qué fue eso?

NARRADORA El Cholo lo miró sonriendo, feliz.

CHOLO ¿Sabes qué es?… ¡Que mi mujer acaba de parirme un muchachito!

CONTROLSICA SENTIMENTAL

NARRADORA Y en medio de la oscuridad de la noche, los ojos negros del Cholo brillaron como luciérnagas.

BIBLIOGRAFÍA
Carlos Salazar Herrera, De Cuentos de Angustias y Paisajes, 1947.

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