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ROSITA

Radioclip en texto sin audio grabado.

Una niña nicaragüense. Migrante pobre. Violada. Excomulgada. Sobreviviente.

LOCUTORA Tenía apenas 9 años. Era hija de una pareja de migrantes nicaragüenses, trabajadores de una finca de café en Turrialba, Costa Rica.

PADRE Hay que desparasitar a la niña.

LOCUTORA Cuando la llevaron al hospital les dijeron que no eran parásitos. Estaba embarazada.

MADRE (ANGUSTIADA) Pero no es posible… ella es todavía una criatura.

LOCUTORA Un muchacho costarricense que trabajaba en la misma finca había abusado de ella repetidas veces. Y por esos misterios del cuerpo humano, la niña tenía varias semanas de embarazo.

VOCERO ¡Última hora!… ¡Una menor de 9 años en estado de gestación!… ¡La niña-madre es nica y fue violada por un tico!

LOCUTORA La noticia llegó enseguida a Nicaragua. A los pocos días, una delegación de la Procuraduría de Derechos Humanos y de la Red de Mujeres contra la Violencia viajó a Costa Rica, visitó a la niña y a sus padres y consiguió traerlos de regreso al país.

MUJER Que se llame… Rosa. Así protegemos su identidad.

DICA Hay que interrumpir el embarazo. Como médica, les aseguro que el cuerpo de esta muchachita no puede resistir el desarrollo de un feto. Puede morir. Pueden morir ella y el tierno que lleva dentro.

LOCUTORA Las leyes de Nicaragua permiten el aborto terapéutico. Los padres de Rosita estaban de acuerdo. La niña, consultada por los médicos, también dijo que sí.

VIEJA ¡Qué horror!… ¡Eso es un crimen, una vergüenza!

HOMBRE ¡Vergüenza debía tener el que la violó y anda suelto!

LOCUTORA El escándalo estalló. La iglesia se rasgó las vestiduras. Los médicos que debían decidir qué hacer dilataban el examen. Temían comprometerse. El vientre de Rosita seguía creciendo y se hacía cada vez más difícil el aborto.

VIEJA ¡Sangre de Cristo, hacerla abortar es un pecado muy grande!

MADRE ¿Y no es más pecado dejar que mi hija se muera?

LOCUTORA Los padres tomaron la decisión y el embarazo de Rosita, de más de ocho semanas, fue interrumpido en Managua la noche del 20 de febrero del 2003. La operación resultó satisfactoria para la niña.

CARDENAL (EN IGLESIA CON ECO) Quedan excomulgados, separados para siempre de la fe católica, los médicos, las enfermeras, los padres y también la niña.

LOCUTORA Monseñor Miguel Obando y Bravo, cardenal de Nicaragua, anunció solemnemente la excomunión de todos quienes habían participado en el aborto terapéutico.

MUJER ¿Y por qué no excomulga al canalla que la violó, eh?

LOCUTORA Desde España, una red de mujeres realizó por internet la campaña “Yo también quiero ser excomulgada”. En pocos días recogieron 26 mil firmas de solidaridad con la opción de Rosita y de sus padres.

MADRE Que digan lo que quieran, pero ella está viva. Alguna vez se olvidará de esta tristeza. ¿Qué daño hizo mi niña para que ese monseñor nos maldiga?

CONTROLSICA DRAMÁTICA

LOCUTORA Rosita. Una niña. Una migrante pobre. Violada. Excomulgada. Sobreviviente.

INTERACTÍVATE
_Abre el debate en tu emisora sobre este caso extremo ocurrido en Nicaragua._

BIBLIOGRAFÍA
María López Vigil, Los nombres de la Rosa, Revista Envío, Managua, marzo 2003.