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LOS NERVIOS

¡Los nervios!… La verdad es que, antes de dominar la voz para locutar bien, hay que dominar los nervios para saber qué vamos a decir. Hay que calmar esos perritos (los nervios) que ladran mucho pero no muerden. Pertenece a la serie: Consultorio radiofónico.

LIBRETO

TIMBRE TELÉFONO

JI Consultorio radiofónico a la orden.

B Oiga, ¿y ahí es donde resuelven todas las dudas sobre la radio?

JI Por supuesto, muchacha. Aquí quien no sabe es porque no pregunta.

GOLPE MUSICAL

JI ¿Qué tal, cómo están ustedes radialistas apasionadas y apasionados? Por acá bien, esperando que el jodido ómicron se largue y nos deje en paz. Esperando también sus consultas para hacer una radio más dinámica, más popular y más profesional, que una cosa no quita la otra. Envía tus preguntas y opiniones a esta dirección:
radialistas@radialistas.net

GOLPE MUSICAL

JI Bueno, van llegando algunas preguntas. Veamos ésta… Nos llega del DF… de México. Y pregunta José Antonio Melgar. Bueno, veamos qué pregunta este medio tocayo…

ASISTENTE Profesor, tengo un programa de radio sobre salud. Pero cada vez que entro en la cabina yo soy el que la pierdo. Me pongo nervioso, se me queda la mente en blanco. ¿Me puede dar algunos consejos para superar este problema?

JI ¡Los nervios!… La verdad es que, antes de dominar la voz para locutar bien, hay que dominar los nervios para saber qué vamos a decir. Hay que calmar esos perritos (los nervios) que ladran mucho pero no muerden.
Ahora bien, vamos a pensar. ¿Existe alguna razón, algún motivo para que una persona no logre expresarse con soltura, con naturalidad, frente a un micrófono lo mismo que ante un amigo o amiga? No la hay. Entonces, ¿de dónde nace el susto, de dónde nacen esos enemigos invisibles, los nervios? ¿Alguien me lo explica?

ASISTENTE Profe, yo creo que del miedo al ridículo. Me parece.

JI Diste en el clavo, muchacha. El miedo al ridículo. (IMITA) Se van a reír de mí, se van a burlar, van a decir que no sé nada… ya estoy escuchando las risas…
Pero nadie se está riendo. Son tus fantasmas interiores que te paralizan la lengua.
ASISTENTE ¿Y qué hago para matar esos fantasmas, para
dominar los nervios? Deme algunos tips, porfa.

JI Veamos. Atiende bien: El mejor camino para vencer el miedo es decidirse a vencerlo. ¿Qué hacer para dominar los nervios? Lo primero, entra a cabina (o al lugar donde vas a hablar) con ánimo positivo, con la cabeza erguida, las manos sueltas, pisando firme. Con buena onda, pues.

ASISTENTA ¿Y después?

JI Respira profundamente tres o cuatro veces antes de empezar a hablar…. (RESPIRO 4 VECES)…

Así oxigenarás todo tu organismo, limpiarás todas las cañerías de tus pulmones… Y te sentirás más relajado, más tranquila.
Oye este truco. A muchas personas les ayuda tener algo en la mano para juguetear mientras hablan…. Un bolígrafo, un palito, una moneda… O la piedra de tu signo zodiacal, como talismán de buena suerte. Ayuda, sí. Se convierte en una antenita a tierra por donde se escapan los nervios.

ASISTENTA ¿Otro tip, profe?

JI Bueno, nada da mayor seguridad al hablar que saber bien lo que vamos a decir. Prepara tu programa o tu charla, organiza tus ideas… ¡y adiós temblores!
En fin, olvídate de los nervios. La segunda vez te saldrá mejor que la primera. Y la tercera, mejor que la segunda. Todo es cuestión de práctica. Practicando y practicando, ganarás confianza y controlarás los nervios. Siempre estarán ahí, los nervios, siempre te provocarán un cosquilleo antes de comenzar a hablar. Pero ya no te harán un nudo en la garganta, ni te dejarán la boca seca ni la mente en blanco.
Verás que en poco tiempo le habrás perdido el respeto al micrófono. Ya no lo verás como una pistola que te encañona sino como un sabroso taco mexicano. Así que, ánimo José Antonio.

Amigas y amigos radialistas, será hasta el próximo consultorio. Ahí nos vemos… mejor dicho, ¡nos escuchamos!

Envíen sus preguntas. Y recuerden: No hay preguntas tontas. Hay tontos que no preguntan.